EL BIG CRUNCH.







El Big Crunch también conocido como la Gran Implosión es una de las teorías cosmológicas  sobre el destino último del universo. Esta teoría es exactamente lo contrario a la teoría del Big Bang. La teoría del Big Crunch explica el fin del universo y está basada en la teoría de la relatividad.







La teoría de la Gran Implosión propone un universo cerrado. Según esta teoría, la expansión del universo, producida por el Big Bang irá frenándose poco a poco hasta que finalmente comiencen nuevamente a acercarse todos los elementos que conforman el universo, volviendo a comprimir la materia. 
Cuando el universo deje de expandirse, colapsará y una especie de agujero negro muy denso y caliente absorberá todo lo que encuentre a su paso, apretándolo en su interior.  La materia iría concentrándose en un solo punto previo, similar al existente antes del Big Bang.




Tras el Big Crunch podría acontecer otro Big Bang, y así sucesivamente. De este modo, no podría descartarse la posibilidad de que nuestro universo provenga de un universo anterior, comprimido tras un Big Crunch.
La Teoría de las pulsaciones, indica que el punto inicial estaba formado por los restos de un universo anterior. Por lo tanto, en algún momento el movimiento de expansión cesará y se iniciaría otro de contracción que impulsaría la unión de los fragmentos. Las fuerzas de atracción buscarán la concentración inicial, y el "huevo cósmico", inestable volvería a estallar, con lo cual se reiniciaría el ciclo. Según esta teoría, los dos procesos se alternarían periódicamente y en forma indefinida.

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